Un radical libre es un átomo con un número impar de electrones o que tiene un electrón libre y desempeñan un papel importante y positivo en muchos procesos celulares. Pero es muy reactivo y puede causar daño a las células, actuando directamente sobre las moléculas de ADN. Disponemos de una maquinaria enzimática encargada de eliminarlos, pero si nuestras defensas antioxidantes no pueden contrarrestarlos, la célula no es capaz de superar ese daño, ni recuperar su función y la célula puede morir.
El estrés oxidativo, por tanto, es la consecuencia de un aumento en la producción de radicales libres, de una reducción de los sistemas antioxidantes de nuestro organismo o de una combinación de ambos. LEER